Reclamo para que el Gobierno de la Ciudad garantice condiciones dignas de habitabilidad del Parador Costanera Sur
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 24 de junio de 2011
La Jueza Andrea Danas, a cargo del Juzgado de 1ra. Instancia en lo Contencioso, Administrativo y Tributario Nro. 9, resolvió hacer lugar a la medida cautelar solicitada en el marco de la acción de amparo presentada por el Ministerio Público Tutelar y ordenó al Gobierno de la Ciudad a presentar en el plazo de diez días un cronograma de tareas que contemple la reparación de desperfectos en los baños y dormitorios. Las obras deberán concretarse como máximo en un mes. También se le exige al Gobierno que establezca e informe tiempos razonables en que –en lo sucesivo- se realizarán tareas de desratización y desinfección.
Como nunca se pudo establecer exactamente la cantidad de personal ni sus funciones, se espera que el Gobierno entregue documentación que detalle sus recursos humanos disponibles en pos de cumplir -a su vez- con el requerimiento de presentar un protocolo de funcionamiento en el cual se contemplen mecanismos de orientación, atención y derivación articulada a los programas con los que cuenta la Administración local, tal como fue solicitado el pasado 3 de mayo por la Asesoría Tutelar Nº 1, a cargo de la Dra. Mabel López Oliva, junto con la Asesora General Tutelar, Dra. Laura Musa, a través de la acción de amparo.
Lo que se ha pedido es que haya un compromiso de trabajo entre los distintos efectores de la Ciudad dirigido a establecer estrategias de egreso que garanticen un acceso más sustentable a la vivienda y la convivencia familiar, y que –además- se asegure la debida asistencia a niñas, niños y adolescentes tanto en cuestiones de educación como de salud. De esta manera, los respuestas serán, probablemente, más eficaces y se pondría fin al círculo vicioso en el cual las familias van rotando de una solución provisoria a otra.
Hace dos años que desde la Asesoría Tutelar Nº 1 se viene observando y cuestionando la situación del Centro Costanera no sólo por las condiciones indignas de habitabilidad, sino porque además no cumple con sus funciones de orientación que determinan que una familia entre al parador y días después salga en la misma situación o con alguna respuesta pero temporal.
En el marco de la inspección ocular, efectuada el 8 de junio pasado, se pudo constatar que aún no están dadas las condiciones óptimas de seguridad e higiene para que la habitabilidad del Centro sea la apropiada.