Página 12, 10 de enero de 2011
Por Cristina Fernández *
No se puede hacer un análisis profundo y exhaustivo de la violencia de género si no se toma en cuenta cómo afecta a niños, niñas y adolescentes, al mismo tiempo que a las mujeres adultas.
Primer caso: tenía 17 años y un padre violento. Vivía en una provincia conservadora del interior.
La familia pertenecía a una comunidad en la que la violencia de todo tipo era moneda corriente y aceptada.